A Tirso debe cumplir su parte del pacto con Dulce. Pero primero debe encontrar esos relojes y después arriesgar su vida para robarlos. Ezequiel y Camila planean tender una trampa a René para demostrar que es un topo del asesino de pandilleros. Mientras, Gladys descubre que Alicia se va a una residencia y que ella debe buscarse otro sitio para vivir. Antes de irse para siempre, Alicia le da a Tirso la clave para afrontar el final de sus días: pensar en qué necesita cada uno de sus seres queridos y tratar de ayudarles a conseguirlo antes de irse. Mientras tanto, Jimena debe dejar a Víctor al cuidado de alguien y recurre a una canguro involuntaria: Amanda.