La llegada de una depresión aislada en niveles altos, o Dana, va a extender el riesgo de tormentas a casi todo el territorio español en el comienzo de septiembre. Los rayos, lluvias, granizo y el viento pueden suponer un peligro en casa y exteriores, especialmente en carretera y el entorno de ríos. Estas son las recomendaciones de Protección Civil para estar protegido ante el temporal que se avecina.

La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) alerta de lluvias intensas y fuertes tormentas que pueden dejar más de 80 litros por metro cuadrado en algunas localidades en tan solo 12 horas especialmente el miércoles. Desde la Dirección General de Protección Civil y Emergencias aconsejan a los ciudadanos que extremen las precauciones y se mantengan informados en todo momento.

Además, las tormentas podrán ir acompañadas de granizo así como de rachas fuertes de viento. En las provincias de Teruel y Zaragoza, Madrid, Guadalajara, Cuenca y en la Comunidad Foral de Navarra, el aviso el miércoles será de nivel naranja, lo que significa riesgo importante, mientras que en el resto de la Península, a excepción de municipios de Andalucía, Cataluña, Galicia y las comunidades cantábricas, el aviso será de nivel amarillo.

El jueves remitirá el riesgo (aunque no en todos los casos la probabilidad de precipitaciones con tormenta) en gran parte del país, no obstante pasará a estar vigente en Baleares.

Frente a las lluvias intensas, Protección Civil aconseja a los conductores que disminuyan la velocidad, extremen las precauciones y no se detengan en zonas donde pueda discurrir gran cantidad de agua. En caso de tener que viajar, recomienda hacerlo preferentemente por carreteras principales y autopistas.

Si comienzan tormentas súbitas y lluvias intensas, Protección Civil recuerda que se debe tener en cuenta el lugar dónde se aparcan los vehículos ya que el rápido ascenso del nivel de las aguas puede dañar los vehículos aparcados sobre zonas inundables y, además, arrastrarlos, provocando daños a bienes ajenos e incluso obstaculizar el flujo natural de la corriente.

Además, añade que si comienza a llover de manera torrencial es posible que exista riesgo de inundación. Por ello, aconseja no atravesar ni con el vehículo ni a pie los tramos inundados porque se desconoce lo que puede haber bajo el agua y recomienda localizar los puntos más altos de la zona y, en medio de una inundación, no debe tratarse de salvar el automóvil.

Protección Civil recuerda a quien se encuentre en el campo la conveniencia de alejarse de los ríos, torrentes y zonas bajas de laderas y colinas, así como de evitar atravesar los vados inundados y dirigirse a los puntos más altos de la zona.

No obstante, insiste en que el difícil pronóstico de los fenómenos tormentosos aconseja mantenerse informado en todo momento de la posible evolución de los cambios meteorológicos.

En el mismo sentido, ante el riesgo de tormentas, informa de que el principal peligro para las tormentas en las personas se produce fundamentalmente en campo abierto. Sin embargo, en los núcleos urbanos también hay peligro de caída de rayos, por lo que conviene colocarse cerca de los edificios para protegerse. En las viviendas se aconseja evitar las corrientes de aire y a los conductores les apunta que un vehículo cerrado puede ser un buen refugio.

Si una persona se ve sorprendida por una tormenta en el campo, debe evitar correr y permanecer en lugares elevados, como los altos de las colinas, crestas o divisorias. También indica de que no debe refugiarse bajo los árboles y que hay que alejarse de alambradas y objetos metálicos.

Por otro lado, ante los fuertes vientos, Protección Civil recomienda asegurar puertas, ventanas y todos aquellos objetos que puedan caer a la vía pública y alejarse de cornisas, árboles, muros o edificaciones en construcción o grúas que puedan desprenderse. También, conviene abstenerse de subir a los andamios sin las adecuadas medidas de protección.

Por último, aconseja a los conductores extremar las precauciones, especialmente en la salida de túneles, adelantamientos y cruce con vehículos pesados en carreteras de doble sentido. También se debe prestar atención a la posible presencia de obstáculos en la carretera.