La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha pronosticado que el trimestre veraniego (junio-julio-agosto) será probablemente “más cálido de lo que es normal en todo el país, tanto en la Península como en las islas”. De hecho, según los pronósticos de la AEMET,  hay entre el 50% y el 70% de probabilidades de tener un verano más cálido de lo normal, una circunstancia más acusada en los archipiélagos. De hecho, el efecto isla de calor puede disparar las muertes este verano.

En cuanto a las precipitaciones, se esperan “lluvias abundantes”, salvo para el Cantábrico y Canarias, donde no hay una tendencia clara, existe una probabilidad de entre el 40% y el 50% de que las precipitaciones queden por encima de lo normal en el trimestre, frente a un 20%-25% de que queden por debajo. “El verano pinta muy caluroso. Puede estar entre los cinco, seis o siete más cálidos de los últimos 30 años. Es poco probable que sea más cálido que el año pasado, que fue extraordinario con 41 días de olas de calor”, ha explicado el portavoz de la AEMET, Rubén del Campo.

El cambio climático nos ha dejado escenas preocupantes en 2022. Una granizada con piedras de gran tamaño en Girona, los reventones cálidos en la Comunidad Valenciana y las lluvias torrenciales de la Región de Murcia con registros de hasta 40 litros por metro cuadrado en diez minutos son algunas de las pruebas que muestran la situación real del planeta. Ahora la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) advierte que el año pasado también fue "excepcional" por los 35 récords diarios de temperaturas altas, lo que supone “siete veces más” que el valor esperable.

El 2022 ha sido el año más caluroso, desde que se comenzó el registro en 1961, superando en 0,6°C el promedio de la temperatura de 15.4 grados de los años 2017 y 2020, así lo ha detallado Rubén del Campo, el portavoz de la Aemet. "Los años más calurosos de toda la serie histórica se han concentrado desde 2017; de hecho, de los diez más cálidos de la serie, nueve pertenecen al siglo XXI", ha añadido.

La ola de calor entre el 9 y el 26 de julio fue “la más intensa y de mayor extensión geográfica de las ocurridas en España desde, al menos, 1975, y la segunda más larga". Se registraron 35 días cálidos que marcaron un récord desde 1950 y dos de días fríos cuando deberían ser 5. La temperatura del agua superficial del mar en las zonas de España ha sido la más alta desde, al menos, 1940 con una temperatura que rozó los 30 grados en el mar Balear los días 11 y 12 de agosto.

Siendo a escala global el sexto año más cálido y el segundo del continente europeo, tan solo se produjeron dos récords diarios de temperaturas bajas, con heladas tardías, a comienzos de abril. Las olas de calor en España, que sumaron un total de 41 días, fueron más relevantes por su intensidad, duración y extensión afectada superando el récord de 2015 con 29 días de calor, destaca el informe.

2022 ha tenido un carácter entre normal y seco en la mayoría de la Península aunque con alguna diferencia. En el tercio norte peninsular (gran parte de Castilla-La Mancha, Andalucía y sur de Extremadura) ha sido muy seco y en áreas de Cataluña, País Vasco, Navarra, norte de La Rioja y noroeste de Aragón extremadamente seco. En cambio, en la Comunidad Valenciana, Murcia, Almería y zonas de Extremadura y Castilla y León han sido húmedos o muy húmedos.

Aunque se registraron más tormentas de lo habitual, la realidad es que son menos intensas en comparación con otros años si nos fijamos en el número de descargas. El año 2022 fue el sexto más seco y el cuarto del siglo XXI con niveles que alcanzaron el 84% del valor promedio. En enero se inició una sequía meteorológica que se mantuvo todo el año y en noviembre comenzó otro de larga duración asociado a un déficit de precipitaciones de los 36 meses previos.