Si a alguien le ha venido bien la llegada de los urbanitas al pueblo, esa ha sido a la María. La esposa del Arsacio ha descubierto un nuevo mundo basado en la igualdad de género y no está dispuesta a renunciar a sus derechos como mujer: “Esto es un patriarcado de manual”.
Por eso, María ha decidido incorporarse al gobierno de Peñafría para que, así, se cumplan “las cuotas de género”: “Los concejales sois todo hombres y no hay paridad de sexos. ¿Cómo se va a dar visibilidad a la mujer en las instituciones?”, ha intentado explicarle al Arsacio.
Pero su marido no ha entrado en razones y, por eso, María le ha puesto como ejemplo a la canciller alemana: "Tu es que estás muy anticuado Arsacio", ha refunfuñado antes de ir a hablar con el Alcalde.