Las playas de Ibiza tienen un gran problema con la venta ambulante. Como casa verano, en las playas más concurridas de Ibiza se llenan de vendedores, con una gran variedad de productos. Un hombre llega con fruta, con ninguna garantía de que sea de calidad. “Compro dos bolsas de hielo y la guardo en una nevera”, comenta el vendedor cuando le pregunta el reportero de dónde saca la fruta.Otros productos que se pueden encontrar son pulseras, pareos, sombreros, mojitos e incluso, lo que más llama la atención al reportero, marihuana.
Los vendedores ambulantes cada vez van más lejos, hace unos días un hombre fue detenido en Palma de Mallorca tras descubrir que vendía marihuana y cocaína escondidas en diademas de luz. Al reportero para enseñarle el material utiliza unas gafas de sol. El vendedor le confiesa al reportero que sus clientes favoritos son los ingleses. “A los ingleses se los vendo por 25€, lo que en Madrid vale 10€”, le dice al reportero, al que también dice que aunque tenga miedo tiene que comer.