El programa ha hablado en exclusiva con la falsa hija del rey, Ana María, la que hace unas semanas se comunicaba con el mismo a través de una carta. Esta mujer habla por primera vez a través del teléfono con una compañera, desde la prisión donde se encuentra y reconoce abiertamente todas las estafas que ha hecho durante todos estos años.
Ana María explica que todo empezó hace más de treinta años: "Es una historia muy curiosa porque yo fui estafada. Yo me vi con un vestido de novia comprado... es una historia muy triste y no me gusta dar pena". Y es ahí cuando empieza su historia delictiva: "Mi primera estafa fue al Opus Dei. He estafado a bancos, a notarios... en la última estafa hay hasta un obispo". Y aunque no quiere dar datos concretos de sus engaños, sí afirma que ha sido mucho el dinero que ha robado: "Las cantidades que dicen, generalmente, son mucho más pequeñas de los que en realidad he estafado".
"Es la vida que me ha tocado vivir. A ver, te explico, uno no se levanta por la mañana y dice: 'voy a ser estafadora'. Las circunstancias de cada uno te llevan a ser lo que eres", así explicaba su situación, lejos de arrepentirse de haber estafado miles de euros a cientos de personas. Además, esta mujer asegura que "sí" podría devolver todo lo estafado, aunque no ha querido dar más detalles de cómo y de cuánto es el dinero del que dispone.
Ana María ha confirmado que utilizaba diferentes métodos para engañar a estas personas: "Se me iban ocurriendo experiencias con los años". Confirma que se hacía pasar por familia de Don Juan Carlos: "Sí, sí, hija del rey emérito, claro". Aunque aclara que esto no era una realidad: "No, no, no. Por supuesto que no, soy hija de un señor y de una señora normales". Pero que se le ocurrió porque se veía "muy parecida con la infanta Elena".