Rosario Porto tiene ansiedad, es obsesiva y depresiva recurrente. Sin embargo, todas estas patologías no afectarían, según los expertos, a sus capacidades cognitivas y volitivas. "La sintomatología depresiva que presentaba en el momento de los hechos que se le imputan no afectaría sus capacidades para comprender la ilicitud del delito imputado", explica el informe.