Aunque en un primer momento se negó a colaborar con la investigación del asesinato de su hija Asunta, Rosario Porto ha accedido a reconstruir lo que, según ella, sucedió el sábado 21 de septiembre, día en el que fue asesinada la pequeña Asunta.
Su versión de lo sucedido se centró en justificar el motivo por el que tardó menos de 20 minutos en su primer viaje entre Santiago y la casa de Teo y 40 en el segundo. Para ello, en la reconstrucción de los hechos que tuvo lugar el pasado jueves 19 de diciembre, Rosario Porto dijo que en su viaje de regreso no fue directamente a su piso de Santiago, sino que al salir del chalé de Teo pasó por una gasolinera cercana, aunque no llegó a repostar. Después de esta parada, la madre de Asunta asegura que fue hacia un centro comercial, pero que a mitad de camino decidió darse la vuelta porque se le había hecho tarde.
Además, Rosario asegura que esa misma tarde fue tres veces a su chalé de Teo, aunque sólo una de ellas fue acompañada por su hija Asunta. Durante la reconstrucción, la madre de Asunta explicó que tras comer juntos en casa de Alfonso Bastera, su exmarido y padre de la pequeña, la niña salió antes y fue al piso familiar de Doutor Teixeiro, muy cerca del de su padre, situado en la calle República Arxentina. Porto fue a por su coche, que guardaba en un garaje del piso en el que vivían sus padres, en General Pardiñas, y pasó a recoger a su hija, para lo que estacionó en doble fila frente a su domicilio.
Porto ha afirmado que al llegar a Teo Asunta se encontraba mal, por lo que la llevó de regreso a su domicilio de Santiago. A continuación regresó a Teo, y de allí fue a un centro comercial, en el que no entró al darse cuenta de que se había dejado la cartera en el chalé. Asegura que regresó a la finca por tercera vez, recogió el monedero y volvió a salir. Pasó por una gasolinera, pero finalmente decidió no repostar y se encaminó de nuevo hacia la tienda de deportes Decathlon. Poco antes de llegar, Rosario asegura que cambió de opinión y decidió darse la vuelta, dejó el coche y fue caminando hasta su casa de Doutor Teixeiro, donde ya no estaba Asunta.
Los investigadores no creen esta nueva versión y dicen que es "rocambolesca". La madre de Asunta ha cambiado hasta cinco veces el lugar en el que supuestamente dejó a su hija y, casualmente, el último es el único en el que no hay cámaras de seguridad. Tampoco entienden por qué en el primer recorrido empleó 19 minutos y después el doble, aunque para eso, Caro también tiene una explicación y asegura que la ciudad estaba colapsada.