Durante el tercer registro en el domicilio de Alfonso Basterra, la Guardia Civil ha encontrado el portátil encima de la mesa del salón y el segundo teléfono en el cajón de la mesilla de noche, sitios que los agentes había revisado anteriormente a conciencia sin encontrar nada. Los investigadores, que llevaban tres meses buscando sin éxito sus efectos personales, especulan con la posibilidad de que alguien pudo llevarlos a la casa.