La madre de Gina DeJesús, una de las secuestradas de Cleveland: "Sólo quiero abrazar al secuestrador y darle la bendición"
Muy positiva y emocionada. Nancy Ruiz nunca perdió la esperanza de encontrar con vida a su hija Gina DeJesus. Hace 15 días, su sueño se hizo realidad. Gina y las otras dos jóvenes secuestradas eran liberadas después de diez años de cautiverio. "Estaba convencidad de que estaba viva y luché durante nueve años. Sabía que estaba viva y que estaba en algún sitio", ha dicho Nancy, que reconoce que cada día de secuestro imaginaba cosas diferentes y que el día que le comunicaron que su hija había aparecido con vida tuvo sus dudas. "Lo supe por mi hermana, que me vino a buscar. Al principio tenía mis dudas porque otras veces habían dicho que la habían encontrado y no era así. Fui al sitio me encontré con un agente del FBI y me dijo que era cierto."
"Para mí seguía teniendo 14 años"
El tiempo se detuvo para la madre de Gina cuando su hija desapareció y nueve años después se encontró con la misma niña. "Cuando la vi, para mí tenía 14 años... Ella está igual física y mentalmente", ha dicho Nancy, que ha confirmado que, a pesar del largo cautiverio su hija estaba en buen estado de salud. "Ahora está mejor todavía... Lo primero que le dije fue lo mucho que la quería y que nunca dudé de que la iba a encontrar. Ella sabía porque me había visto en la televisión. Le cuesta llorar."
Tras pasar por el hospital, la vuelta a casa fue muy emotiva. Gina pidió a su madre que le enseñara toda la casa. Allí se sintió segura. "Todo estaba igual menos su cuarto porque lo cogí yo y dormía allí. Cuando llegó se sintió segura, no tenía miedo, reconoció todo...", ha explicado Nancy, que ha confirmado que su hija está recibiendo ayuda psicológica y que no habla mucho del tema. "No habla mucho conmigo del tema pero le he explicado que cuando se sienta bien puede venir a hablar conmigo.... No habla mucho de lo que sucedió pero ha mencionado a Ariel que ha confesado que duerme cada noche con su hija.
Ariel Castro sólo le dejaba ver la televisión el día del aniversario del secuestro
Durante nueve años, Gina ha permanecido ajena a lo que sucedía en el mundo. Su vida se desarrollaba entre las cuatro paredes de la casa de Ariel Castro, que únicamente le permitía ver la televisión el día del aniversario del secuestro. "Según me ha explicado veía la tele cuando era el aniversario para que me viera", ha explicado Nancy, que ha asegurado que esto le daba más fuerza a Gina para aguantar y seguir adelante. "La fe es la que nos ha mantenido a ella y a mí", ha explicado Gina, que ha confirmado que las tres jóvenes han mantenido el contacto tras la liberación. "Tiene contacto con las muchachas. Durante el cautiverio tuvo contacto con ellas, se defendían las unas a las otras y se ayudaban", ha explicado Nancy, que ha asegurado que les resultó muy difícil separarse.
"Gina está regresando a su vida con una sonrisa"
Quince días después de su liberación, Gina va retomando su vida poco a poco. "Lo está cogiendo suave, ha salido al patio... Lo está haciendo poco a poco pero lo está haciendo con una sonrisa porque sabe que está libre... No ha podido salir pero esperamos que pronto pueda hacerlo", ha explicado Nancy que ha revelado que lo primero que le dijo su hija fue que quería ir a un centro comercial muy popular en la zona y que le pidió que le hiciera pollo frito, maíz y papas majadas.
Nueve años después de su secuestro, Gina quiere hacer todo aquello que dejó cuando Ariel Castro se cruzó en su camino. "Piensa ir a la escuela, terminar su estudios, aunque de momento va a estudiar en casa", ha dicho Gina, que quiere disfrutar del momento. "No hemos hecho planes, quiere levantarse y vivir, pasar el tiempo juntas, divertirnos...", ha dicho Gina, que ya tiene preparado un viaje para ir a ver a los abuelo de Gina, que disfrutar de las visitas que recibe en los últimos días, entre ellas las de sus compañeras de colegio. No pudimos dormir, estábamos llorando, abrazándonos, hablando... . Yo he pasado muchas veces por la casa.
"Yo sólo quiero abrazar al secuestrador y darle la bendición"
A pesar del daño que Ariel Castro ha ocasionado a Gina DeJesus y su familia, Nancy no piensa en la pena capital. "Yo sólo quiero abrazarle y darle la bendición porque tiene que encontrarse con Dios el día del juicio final", ha explicado Nancy que ha relatado que conocía al secuestrador desde hacía años. "Le vi el año pasado y me pidió un cartel de búsqueda de mi hija. Para mí, era una persona normal, era músico, tocaba en grupos... No sospeché nada", ha dicho Nancy.
"Las chicas se van a recuperar"
Aunque han sido diez años de pesadilla, Nancy confía en que las chicas se van a recuperar y van a superar el duro trance. "Lo de Gina no fue tan grave, pero ella va a estar bien... Michelle va a tardar un poco pero lo va a conseguir", ha dicho Nancy.
"A Ariel le echaría la bendición y que Dios se encargara del resto"
Dos semanas después de la liberación de las tres jóvenes de Cleveland, 'El programa de Ana Rosa' ha hablado con el tío de Ariel Castro, que ha asegurado que nunca imaginó que alguien de su familia pudiera estar detrás del secuestro. "Ha sido increíble. Yo me uní a las familias en la búsqueda y en el dolor y no esperaba que un miembro de mi familia estuviera envuelto en esa crueldad. Él era un gran sobrino y para la comunidad un gran músico", ha dicho Julio César Castro, que asegura que la relación con su sobrino se enfrió hace unos años. "Se distanció de mí hace unos seis años, por respeto y temeridad de que fuera detectar algo en la maldad que tenía... ", ha explicado Julio César, que asegura que de haberlo sabido hubiera tomado medidas y que en cuanto se enteró de la liberación avisó a la familia de Gina DeJesus. "De inmediato lo llamé, lo triste fue que salió a relucir que era mi sobrino. Los vecinos nunca tuvieron la oportunidad de ver nada. Nosotros entrábamos a la casa porque antes de ser Ariel era de un hermano mío, pero después nada", ha explicado el tío del secuestrador, que tiene clara la condena para su sobrina. "Todo el mundo se queda anonadado cmo una persona tan leal y alegre tuviera por dentro ese odio y esa maldad. ¿Cómo pudiste hacer esto? ¿Cómo pudiste hacerle tanto daño a la comunidad, la familia y a las familias de las niñas? Le echaría la bendión y que Dios se encargue del resto."
