Desde su casa en Madrid, Helena fue testigo de como Isabel perdía a sus hijos. La angustia se apoderó de ella, que sigue atrincherada en su casa por miedo a que la quiten a sus hijos. "Me han dicho que cabe la posibilidad de hacer una exploración psicológica a los niños y viendo lo que le ha pasado Helena no sé a lo que me expongo", ha dicho Helena.