El mercado ilegal de vacunas es una realidad que se puede encontrar en los suburbios más oscuros de internet. 'El programa de Ana Rosa', en una investigación muy cuidadosa, consigue hablar con uno de los traficantes, desvelando el precio y condiciones de acción pagada en criptomonedas.
El periodista que realiza la investigación explica que a ese mercado ilegal de vacunas no puede acceder cualquiera. Para empezar, hay que acceder a lo que los expertos llaman 'dark web', un lado oscuro de internet en el que hay que utilizar otro tipo de navegador y donde llegas a encontrar "un catálogo de todas las marcas de vacunas".
El investigador explica, tras consultar con muchas empresas de ciberseguridad, que estas ofertas son "una estafa masiva que se aprovecha de la desesperación de la gente, pagas y no llega nada".
"El 99,9% de los casos son una estafa, está todo muy protocolarizado y las vacunas están protegidas por las autoridades...", dice el reportero. Eso sí, las empresas de ciberseguridad no dudan de la existencia del tráfico de vacunas en plena pandemia: "Ahora bien, que exista o no un mercado negro de vacunas...".
"Nos dicen que hay de todo, pero hay cierta coordinación, que han aumentado las ofertas en internet, no en el internet normal, puesto que hay que usar un navegador especial y ahí se vende prácticamente de todo", explican los trabajadores de ciberseguridad.
Los precios encontrados en la venta ilegal de vacunas oscilan entre los 250 y 1.200 dólares. Es decir, entre los 200 y 1.000 euros. Un pago que se hace en criptomonedas para no dejar rastro. Eso sí, el reportero explica a Ana Rosa que esto puede cambiar: "Es verdad que ha ido evolucionando, hay más vacunas, más oferta y los precios han ido variando desde enero".
El reportero consigue encontrar un catálogo de vacunas y decide llamar para comprar una dosis de Pfizer. El traficante, al ser preguntado, no duda en confirmar a nuestro compañero: "Sí, sí, puedo conseguirte una vacuna del covid"
En ingles y con mucho secretismo, el traficante confirma en la llamada que las vacunas las obtienen de la mismísima empresa de Pfizer: "Tengo a alguien que trabaja en la compañía y es donde consigo el material". Unas vacunas que serían robadas y enviadas a cualquier parte del mundo.
La vacuna Pfizer debe mantenerse y ser transportada a -8 grados. Sin embargo, el traficante explica su método de envío: la inyección metida en una nevera y desplazada en una compañía de transporte. "Tenemos un 'incúbito', que es una nevera, para guardar la temperatura y te llevamos la vacuna ahí", dice el traficante.
Por otro lado, por si existen dudas de si va a llegar, el hombre desvela que hay han enviado material a cualquier parte del mundo: "Las hemos transportado a Chinca, a África...". En cuanto al dinero, confirma que el pago se debe realizar en "criptomonedas", que es un método que no deja rastro. Por último, el sospechoso te llegaría a ayudar a ponerte la vacuna: "Una vez te llega la vacuna, si no sabes cómo inyectarla te hago una videollamada para explicártelo".