Tras la muerte de una anciana en Reus a causa de la 'pobreza energética', el debate se ha abierto de nuevo. Ana Isabel forma parte del 11% de la población que no puede pagar las facturas. Ingresa 700 euros y paga 600 de hipoteca, tiene dos hijas y la luz es todo un lujo para ellas. Durante los meses fríos del año no pueden permitirse encender la calefacción, por lo que se calientan con mantas eléctricas, bolsas de agua y un calefactor que encienden muy poco porque gasta mucho. En 2015 ya les cortaron la luz y tenían que entrar en casa alumbrándose con una linterna. Ana Isabel nos cuenta el desembolso que hay que hacer para recuperar la corriente, ya que además de pagar la factura hay que embolsar un dinero extra por hacer un contrato nuevo. "No puedo entender que te pongan tantos impuestos en algo como la luz que es fundamental. Los dueños de las eléctricas tendrían que probar a vivir un mes sin luz", ha comentado esta madre de familia.