Ha pasado casi un año desde que comenzó en España la pandemia del coronavirus y la hostelería, con y sin restricciones de seguridad, sigue al borde de la ruina.
Si la llegada de las vacunas había dado alguna esperanza a los sectores que han caído en picado por el virus, el retraso en la vacunación y la llegada del temporal Filomena, con el que se recomienda a todo el mundo quedarse en casa lo máximo posible, les ha vuelto a dejar en la peor situación.
Por todos estos motivos, y por la falta de ayudas del Principado de Asturias que, según él, hizo una “reapertura de la hostelería” encubierta, Patricio se pasa 12 horas al día – la mitad de una jornada laboral normal – metido en una caja para reclamar un “pacto de estado” que ayude a todos los hosteleros de España.
Así lo ha reivindicado en el programa: “Me pregunto por qué no hay dos metros de distancia en los autobuses, en los aviones o en los centros comerciales. Yo lo único que pido es trabajar, trabajar, trabajar; y el único lema de los gobiernos es engañar, engañar y engañar”, ha lamentado, pues asegura que, aparte de los ERTE, no ha recibido "ninguna ayuda" por parte de las autoridad.