'El programa de Ana Rosa' entrevista en directo al ganadero Roberto López. El trabajador lleva meses alertando sobre la situación que atraviesa su sector, el cierre de granjas, la muerte de vacas y, por supuesto, la escasez de leche que habrá a medida que pase el tiempo en los supermercados.

La industria ganadera está al límite y el granjero explica el motivo: "Ha subido el precio porque los inútiles se han dado cuenta que no llegaba leche a las fábricas, estábamos matando a las vacas y la cantidad de leche en camiones iba a menos...".

"Llevamos avisando desde octubre, pues en abril reaccionaron al ver que los camiones pasaron de llevar 25.000 litros de leche a 18.000, ahí se dieron cuenta que no les llegaba para cumplir los contratos con estos atracadores de la distribución...", sentencia López. Luego, concluye con mucha resignación: "Al no haber leche, dijeron los de la distribución que le subieran 'un poquito' al ganadero para que no se murieran".

Roberto López tiene que morderse la lengua a la hora de hablar sobre poner un tope al precio final del cartón de leche: "¡Llevamos exigiendo un precio mínimo de la leche que nos cubra los precios de producción y nos decían que era imposible! Ahora, con un par de bemoles dice esta señora ministra que lo toquen por arriba, que me parece muy bien, pero que la ministra de Trabajo se tenga que sentar con los de la distribución porque el inútil del ministro de Consumo y Agricultura no tiene lo que hay que tener... ¡es que se saltan al de agricultura!".

Sin embargo, desde que se produjeron las palabras de Yolanda Díaz, todo ha ido a peor para el sector: "¿Piensa que los de la distribución van a bajar su margen de beneficio? Desde que la ministra dijo eso, los jefes de compra de la industria frenan las subidas que estaba habiendo en el precio de la leche. Por si no lo sabe la señora ministra y el inútil de Consumo, la industria dice que tiene que frenar la pequeña subida que estaba habiendo porque hay que topar los precios".

Por otro lado, Roberto López no puede esconder en pleno directo su total indignación con la gestión del Gobierno de España: "Estamos hasta las narices de que se nos tome por el pito del sereno".

El ganadero es muy claro con la situación del sector: "El precio sube porque no hay leche, no hay más". Después, el entrevistado pasa a explicar su frase: "El precio en la distribución sube porque no hay leche, en el mes de julio ha descendido un 5% la producción láctea respecto al del año pasado, han cerrado 120 granjas de leche en este país, parece que no le importa a nadie. Se han matado 50.000 vacas de leche, más de las que tocaba matar, no sé de dónde pretenden que salga la leche".

"Para que estos indeseables de la distribución os pongan la leche como producto reclamo con grandes carteles en la entrada, le pagan una mierda al productor para ponerla a unos precios de mierda en la distribución, ése es el gran problema" confiesa muy enfadado el ganadero.

Por último, se dirige a los grandes distribuidores y da un zasca al Gobierno: "Salen diciendo que necesitan ayuda y que le bajen los impuestos, ¡que pongan paneles solares como nosotros, que les baje el recibo de la luz y así ahorran! El sector primario sigue trabajando cada vez menos y ahora saldrá el ministro diciendo 'no os preocupéis, está todo garantizado".