El paradero de Juan Carlos I desde que hace unos días se supiera que abandonaba España es uno de los temas más candentes del momento, por ello, ‘El programa del verano’ ha querido contactar con Luz García, periodista en República Dominicana, lugar que parece al que ha viajado el rey emérito.
La periodista ha hablado sobre esto: “La República Dominicana puede ser un excelente destino para Juan Carlos I, son largos los lazos de amistad que tiene antes de ser rey. También se rumorea que en ese momento dejó una novia dominicana”. Luz ha comentado sobre lo que dicen las autoridades: “Desmienten que haya entrado de manera oficial y yo hice investigaciones sobre si se encuentra en Casa de Campo, que es la propiedad de la familia Fanjul y aquí también informan de que no hay una visita oficial”.
Sobre cómo son las propiedades de Pepe Fanjul: “Esta propiedad es un resort, es una gran urbanización donde se tienen muchos mecanismos de seguridad, es una ciudad cerrada. Habitan unas 600 familias millonarias de diferentes países de manera fija, pero hay unas 2200 propiedades que oscilan desde los 500.000 dólares o mansiones de hasta 25 millones de dólares. La familia Fanjul tiene la mayor parte de las acciones de este resort, aquí tienen todas las comodidades, la seguridad, para figuras que representan la magnitud del rey emérito puedan habitar tranquilos y cómodamente: desde campo de golf, canchas de tenis,… Un paraíso luxury del Caribe y de América Latina. Han pasado muchísimas celebridades como Marc Anthony, Juan Luis Guerra, en algún momento Shakira, Jennifer López, Beyonce,…”
Pepe Fanjul, de este empresario cubano de origen asturiano, se está hablando mucho estos días, porque todo apunta a que esta sería la persona que ha acogido a Don Juan Carlos tras su marcha de España. Son amigos desde hace varias décadas y en todo este tiempo han sido muy frecuentes sus encuentros: "somos muy amigos, es una relación muy especial para mi". Pepe no confirma ni desmiente si ha acogido al monarca, lo que si ha hecho es asegurar que no le gusta nada la manera en la que se está tratando al rey emérito en los últimos tiempos.