El periodista Julio Uzal localiza a la joven de 22 años conocida como 'la reina de la burundanga' que está acusada de envenenar a siete personas en León para robarles hasta 40.000 euros. Tras rechazar ser grabada por la cámara, acepta hablar con el periodista. "Si haces algo lo tienes que pagar, pero en la cárcel, no de cara al público", dice.
La joven, acusada de usar la sustancia escapolamina para anular la voluntad de las víctimas de sus robos, familiares y amigos de su entorno, denuncia que se está haciendo un juicio social y mediático paralelo. "No puedo hacer deporte ni salir a ciertos sitios porque me van a mirar en todos lados". "Y si salgo inocente ahora, ¿qué pasa?", comenta.
También confiesa que su adicción al póquer le hizo perder la razón y asegura que ya ha dejado el juego: "El póquer es como la droga. Cuando estás atrapado en la droga, no piensas las cosas. Ya ni juego ni quiero saber nada de eso mundo".
Por último, habla de su paso por la cárcel. "Después de la muerte, la cárcel es lo peor que hay". Y añade: "Si tengo que pagarlo con la cárcel, lo haré".