Cuando Mariano Rajoy dijo, cuando era aún presidente, que sus presupuestos se los comería Pedro Sánchez ‘con patatas’, nadie se imaginaba que tres años después tuviera razón. La falta de un gobierno estable y de la formación de gobierno ha provocado que España siga con los presupuestos de Montoro.
“Es mejor tener gobierno que acierte a no tener, pero es mejor no tener gobierno a tener uno que se equivoque”, declara Gonzalo Bernardos, el cual dice que aunque estos presupuestos no están hundiendo la economía, sí que presentan ciertas ausencias, como en gasto social. “Estamos con un gasto social que responde a una situación de crisis”, comenta Bernardos.
Los verdaderos problemas de esta falta de presupuestos es que las Comunidades Autónomas no podrán contar con los casi 5.000 millones, lo que provocará más listas de espera, menos renovación de colegios, disminución de ayudas, etc. Toda esta situación hace que las familias se encuentren en una situación en la que dudan si gastar mucho o ser precavidos. “Las familias no lo tienen tan claro como para gastar tanto”, comenta Bernardos, que cree necesario unos presupuestos adaptados a la situación del país.