Pablo Casado comparece en 'El programa de Ana Rosa' para analizar la situación covid en España, pronunciarse sobre la polémica de Illa y las elecciones catalanes y, sobre todo, explicar cuál es el papel del PP en las nuevas acusaciones lanzadas por Luis Bárcenas.

El líder del Partido Popular no entiende el motivo por el que el ex ministro de Sanidad ha rechazado realizarse un simple test. De hecho, Casado y Ana Rosa coinciden en poner el mismo ejemplo: "Si en Mediaset no te haces el test en la entrada no puedes acceder, no lo entiendo".

La posibilidad de que Salvador se haya vacunado coge fuerza y Casado no ha tenido piedad con este asunto: "Si Illa se ha vacunado debería dimitir de manera inmediata. Fiscalía lo tiene que aclarar". Luego, sobre este tema, termina aportando sobre Illa: "Quien no ha podido salvar vidas difícilmente va a poder gestionar Cataluña".

En cuanto a este tema, Casado intenta explicar las diferentes situaciones entre Galicia y la Comunidad de Madrid: "Primero, en Madrid tenemos desgraciadamente un 20% de inmunidad; segundo, la concentración de población en el espacio hace que las limitaciones de movilidad sean más difíciles; y tercero, la capacidad asistencial es diferente, Madrid tiene pequeña extensión pero si haces un diámetro, en una hora tienes 30 hospitales y en otras zonas la asistencia hospitalaria es menos flexible".

Sin embargo, el líder del Partido Popular matiza que tanto Ayuso como Feijóo se han basado en las mismas normas: "Los dos han pasado por fase distintas aplicando los mismos criterios, que son los de la OMS: la capacidad de camas UCI y la incidencia de contagios".

Por último, Casado argumenta que en su familia hay sanitarios y termina confesando que "la campaña de vacunación ha sido un caos, una desorganización absoluta y la gestión ha sido muy mala".

Pablo Casado ha querido empezar este apartado dejando claro que, desde su llegada como líder de los 'populares', "hemos tenido que reivindicar el orgullo de un partido que ha hecho tanto por España y decir que hay cosas que se pueden mejorar".

El líder del PP declara que cogió al partido siendo la tercera fuerza nacional y que para eso hay que remar en el mismo sentido: "Si queremos ser la primera fuerza hay que mejorar algunas cosas". El político explica que desde su llegada "siempre hemos trabajado contra la gestión de Cataluña, la gestión económica en España con los impuestos y la gestión de la corrupción".

Por otro lado, Casado confiesa que "los tres candidatos a las primeras pensábamos lo mismo, se tendría que haber evitado el 1-O, podemos decir que las cosas se podían haber hecho mejor, no se tenía que haber votado, no se tendría que haber llevado a las fuerzas de seguridad a esos límites".

La primera pregunta a la que ha hecho frente Casado es sobre la ahora implicación de Enrique López con Bárcenas: "El señor López era juez en el año 2016 y no llega al partido hasta cuatro años después, mantenemos lo que dice el propio abogado, que no dio cuentas, lo que dice el señor López y lo que puedo decir en primera persona, ya que Bárcenas nos presentó una querella a Maroto y a mí".

El líder del Partido Popular, harto de las acusaciones y la interminable sospecha sobre su partido, se dirige a Bárcenas: "Que ponga las pruebas encima de la mesa y si alguien que está implicado los estatutos del partido dirán lo que se debe de hacer". Además, por si hubiese dudas, añade: "Tengo profunda tranquilidad porque no nos va a temblar el pulso si alguien es acusado por un juez".

La cara del 'popular' cambia al hablar del Gobierno de España: "Eso parece el camarote de los hermanos Marx, cada día es una cosa, discrepan por las mascarillas, la heredera al trono, los Fondos Europeos...". Sin embargo, no ha podido evitar centrarse en Iglesias: "Discute que la princesa vaya a un colegio que lo paga su padre con su sueldo cuando cuesta más la niñera que él utiliza y que la paga con el dinero de todos los españoles".

Ana Rosa corta al político y le pregunta por qué no llega a acuerdos con Sánchez y ahí, nuevamente, Casado ha sido muy claro: "Mi postura siempre ha sido si rompes con independistas y comunistas podremos hacer pactos de estado que den estabilidad en el Gobierno. Poder gobernar como se hace en Europa...".

"Yo llamé a Sánchez en octubre, luego en diciembre, le dije que estaba dispuesto a apoyar los Fondos Europeos y él no quiso", dice muy serio el del PP. Luego, declara: "A última hora consiguió el apoyo de Vox, ¿habrá que preguntarle a ellos?, ¿por qué le dar carta blanca para permanecer en el poder?".

En cuanto al Gobierno, Casado termina anunciando a los españoles la última gestión de Sánchez: "La semana pasada volvió a pactar con los radicales de Cataluña, quien quiera un cambio radical en Cataluña no puede realizar estos pactos"

La relación con Abascal ha sido muy debatida en las mesas políticas y ahora Pablo se pronuncia: "Estoy en política para representar a los españoles y no en establecer alianzas, no soy parte de ningún bloque, no miro cuánto sumo con Ciudadanos y Vox, yo quiero ganar las elecciones".

"El PP va a ganar a Sánchez y vamos a intentar salir de una crisis que ha dejado a cinco millones de parados y 90.000 muertos que en parte vienen dados por la pésima gestión de este Ejecutivo", analiza.