La incertidumbre se apodera de Madrid mientras los ciudadanos intentan hacer una vida normal y los dirigentes políticos añaden una serie de medidas que no son claras. Esta normas, como dijo el inmunólogo Corell, llegan tarde y Ana Rosa no entiende por qué no se efectúan las mismas leyes que tiene el resto de Europa.
La presentadora del programa confiesa no tener claro los motivos por los que el Gobierno cambió de actitud de un día para otro, justo la misma semana en la que se había reunido con Ayuso en la sede de la Comunidad de Madrid: "Si realmente la situación está mal en Madrid, está mal en muchos sitios...".
Luego, Ana Rosa ha continuado su discurso en el que la presentadora confiesa que está confusa: "Sigo sin entender por qué se pone el límite en 500 por 100.000 habitantes, si en Europa se están poniendo los límites en 250 por 100.000 habitantes".
"Hagamos ya por 250, hagámoslo de una vez, hagamos cosas que realmente sirvan", declara con énfasis Ana Rosa. Por otro lado, añade que la nueva normativa afecta a todos pero aclara que "la vida de los madrileños, excepto salir para ir al pueblo o en el puente, no va a cambiar".
La presentadora explica que los más afectados es el sector de la hostelería pero, eso sí, matiza que la situación "va a cambiar en los establecimientos, la gente no se contagia en los restaurantes, pero igual es más útil si le dicen a los propietarios que a las 11 tienen que cerrar, ¡pues a las 11 todo el mundo en su casa!".
Por último, Ana Rosa ha querido destacar el gran agujero que tiene Madrid: el aeropuerto de Barajas. La presentadora no entiende que los ciudadanos no puedan salir de su municipio pero que sí puedan marcharse en un avión a otro país o recibir a los extranjeros: "Yo puedo ir a Bélgica, si me dejan entrar, el belga puede entrar y yo no puedo ir a Pozuelo... ¡es como ridículo!".