Amante de la pesca según mostraba en sus redes sociales, este es Sergio, el presunto asesino de Meco. 29 años, novio de Celia, la mejor amiga de Mimi, y compañero de piso de ambas. Trabajaba en una empresa farmacéutica junto a su pareja, pero antes había sido mecánico. Su relación con Mimi no era buena y siempre estuvo en el punto de mira de la policía, pero él tenía una cuartada, estaba jugando a la consola. Sin embargo, entre las las 9 menos 20 y las nueve menos 10 estaba en línea, pero no realizó ninguna actividad, una pista clave que ha provocado su detención. Tras la muerte de Mimi, lo dejó con su novia y volvió a casa de sus padres en Azuqueca de Henares dónde ha vivido sin levantar sospecha desde entonces. Sergio acudía periódicamente a visitar a los padres de la víctima y les ofrecía su ayuda.