Los vecinos de un barrio de Marbella están casados de varios narcoedificios que se encuentran frente a un colegio. Los vecinos se han acostumbrado a que en ese barrio se paseen toxicómanos que cada día acuden al barrio para poder conseguir su dosis. Según los vecinos, es un clan el que ha ‘okupado’ varios edificios donde se vende droga. Cuando el reportero pregunta a una madre sobre si los niños preguntan por lo que ven, esta es muy clara: “A los niños no le llama la atención porque están acostumbrados a verlo”.
Una vecina de este edificio dice preferir desentenderse y hacer su vida sin meterse en los asuntos de esta familia. Cuando el reportero habla con alguno de los toxicómanos que acude diariamente a este barrio, este le habla de que la droga que venden no es de calidad: “A mí me han pagado por llevar a gente a los pisos, 5 o 10 euros”. Un hombre que lleva cuatro décadas y conoce perfectamente la zona le cuenta porque cada vez hay más drogodependientes: “El camello grande a los chavalitos que empiezan incluso les invitan dos semanas y cuando se han enganchado le sacan las tripas”.