La Audiencia de Navarra ha rechazado el encarcelamiento por el caso del pasaporte de Antonio Manuel Guerrero, más conocido como el guardia civil de 'La Manada'. Los magistrados del tribunal han decidido, por dos votos contra uno, que Guerrero permanezca en situación de libertad provisional al haber aceptado las explicaciones de la defensa y la funcionaria con la que Guerrero habló para sacarse su pasaporte, algo que iba en contra de las medidas cautelares.
El condenado por abusar sexualmente de una joven en los sanfermines de 2016 rompió este lunes su silencio para asegurar que él jamás usó un teléfono móvil en la prisión de Alcalá Meco, algo totalmente prohibido. "Es totalmente falso", comentaba a la salida del juzgado de Sevilla. Sin embargo, un preso de la cárcel militar contradice la versión de Guerrero.
En la segunda parte de la entrevista exclusiva que este programa ha realizado a este preso, que compartía módulo con Guerrero y con Alfonso Cabezuelo, el militar de 'La Manada', el hombre explica cómo fueron los primeros días en prisión de los dos sevillanos. "Al principio Guerrero era desafiante y un poquito chulo", asegura.
Además, el entrevistado explica que los módulos en los que permanecen Guerrero y Cabezuelo "son muy light" y se realizan comunicaciones diarias con familiares y amigos. "Son comunicaciones de lunes a domingo y algunos, incluso, pueden llegar a tres o cuatro horas", añade. Esto contrasta con la situación más restrictiva de los otros miembros de 'La Manada' que se encuentran en el centro penitenciario de Pamplona (José Ángel Prenda, Ángel Boza y Jesús Escudero), donde reciben visitas solo los fines de semana.