Tras la decisión del juez de archivar el caso y abrir el secreto de sumario, hasta el momento hay una serie de incógnitas como la ropa que llevaba, pero también certezas como que sí acudió a las fiestas del pueblo y la última vez que la vieron sus amigos. Y una sola prueba que está en manos de la Policía, el móvil de la joven y varios mensajes de whatsapp.