El marido de Arantxa Sánchez Vicario pide el divorcio y la custodia de los niños alegando incapacidad de la tenista
Josep Santacana, el marido de Arantxa Sánchez Vicario, ha puesto la demanda de divorcio y pide la custodia de los dos niños que tienen en común alegando que la tenista no estaría en condiciones psicológicas para cuidar de ellos. Santacana estaría viviendo con otra mujer desde hace meses mientras que Arantxa sigue en su casa de Miami. Las numerosas deudas, pondrían a la tenista en una situación económica muy delicada.
El periodista Antonio Rossi ha accedido a toda la documentación sobre el divorcio que se encuentra en la corte de Miami. Según Rossi, Josep Santacana interpone la demanda a la tenista el 3 de enero. Él hace una declaración jurada en la que solicita la custodia de los hijos y pide una moción de emergencia para poder recoger a los menores porque ella supuestamente no se los dejaba. Además, solicita un mediador entre los dos para las cuestiones legales de los niños.
Por su parte, Arantxa pide en la corte que se le devuelvan sus pertenencias y más tiempo para responder a las acusaciones de él. El día 13 de febrero, uno de los dos pide una orden de alejamiento, pero el juez no se ha pronunciado aún.
'El programa de Ana Rosa ha podido contactar con Javier Sánchez Vicario, hermano de la tenista. "Tenéis que hablar con ella, es una cosa personal que tiene que responder ella y luego hablaré yo", dice. El resto de la familia ha decidido mantener también el silencio sobre este divorcio. Sin embargo, la periodista Marisa Martín-Blázquez asegura que la tenista cuenta con el apoyo absoluto se su madre.
"Lo que más le preocupa a la familia no es tanto el recuperar lo que está a nombre de él como la situación de los menores de edad", añade Martín-Blázquez.
El conflicto entre la tenista y su familia empezó con un informe que los Sánchez Vicario encargaron a un investigador para averiguar todo sobre el entonces novio Josep Santacana. El informe que costó alrededor de 100.000 euros, sacaba las siguientes conclusiones: Santacana tenía problemas económicos graves, debía dinero a la Seguridad Social y su expareja lo tildaba de estafador y deudor profesional. La tenista confió en él y se casaron sin separación de bienes. Además, le nombró administrador de sus bienes. Desde entonces, la relación entre la tenista y su familia se distanció sin remedio.
