Los Mossos d'Esquadra pueden haber resuelto el crimen de Susqueda. Según informa Ángel Moya, varios agentes de los Mossos han detenido a un hombre de 57 años por el crimen de Marc y Paula en el pantano de Susqueda (Girona). La detención del presunto autor del doble asesinato se ha producido seis meses más tarde de la desaparición de los jóvenes y cuatro meses después de que fueran encontrados sus cuerpos sumergidos en una zona del pantano de difícil acceso. Según Moya, unas cámaras de seguridad captaron el coche del detenido en la zona en la que desaparecieron los dos jóvenes.
El coche del sospechoso fue grabado por una cámara de seguridad de la zona y visto además por varios testigos en el escenario del crimen.
Los Mossos llevaban investigando al detenido desde agosto, un hombre de unos 57 años que vivía en Santa Coloma de Farners, a 20 kilómetros del pantano de Susqueda. El detenido, de nombre Jordi, tenía antecedentes penales por asesinar a su mujer con un arma de caza en 1997 en Anglés. "La he matado porque la quería y no soportaba la idea de vivir sin ella", llegó a comentar.
El detenido en Coloma de Farners había salido de la cárcel recientemente y tenía dos hijos mayores de edad de su anterior matrimonio. Uno de ellos, que sigue manteniendo relación con su padre, ha sido también detenido por el asesinato de Susqueda.
El programa ha mostrado la condena de asesinato del año 2000 del detenido por el doble crimen de Susqueda el pasado mes de agosto en el pantano de Susqueda. Jordi cumplió una condena de 15 años por matar a su mujer en diciembre de 1997 en plena calle de Anglés y propinarle tres disparos en el costado izquierdo porque no permitía que su exmujer rehiciera su vida con otra persona. La remató con un cuarto disparo cuando ella estaba en el suelo. La Fiscalía había pedido 20 años, pero quedaron en 15 años porque el acusado padecía un trastorno ansioso depresivo tratado desde hace años.
El presunto autor de Marc y Paula presumía en sus redes sociales de ser buen cazador y, además, hay imágenes suyas pescando en esas mismas aguas donde desapareció la pareja. Actualmente, declara que está casado con una mujer de origen colombiano. Los investigadores creen que el presunto asesino de Marc y Paula se deshizo del Opel Zafira sin ayuda.
El resultado de las autopsias realizadas en los cuerpos de Marc y Paula, asesinados en el pantano de Susqueda (Girona), aportó nuevas pistas sobre el doble crimen. Paula, de 21 años, murió ejecutada de un disparo en la cabeza realizado por una arma corta de 9 milímetros, lo que hace que pierda fuerza la hipótesis de que fueran asesinados por un cazador furtivo.
En cuanto al cuerpo de Marc, de 23 años, los forenses han determinado que permaneció en el agua durante 33 días y han encontrado otro orificio de bala en un lateral del cuerpo, así como heridas superficiales de arma blanca y señales de munición, como si hubiese intentado protegerse en un mano. Por otro lado, el estado de descomposición del cuerpo hace que los forenses no puedan confirmar si Paula sufrió una agresión sexual.
Se confirma así la primera hipótesis de los Mossos, que consideraban que el autor del doble asesinato conocía bien la zona del pantano, tanto por los lugares donde aparecieron el kayak inflable propiedad del chico y los cuerpos sumergidos sin vida de Paula y Marc como por la forma del autor del doble homicidio de deshacerse del Opel Zafira azul que conducía Marc.
El programa realizó una reconstrucción del doble homicidio del pantano siguiendo tres puntos claves en la investigación: el kayak, el coche y los cuerpos, y cada uno de ellos han aparecido en diferentes puntos del embalse. Un equipo del programa ha recorrido junto a un experto que conoce la zona y un coche de similares características que el que conducían Marc y Paula para comprobar las dificultades y el tiempo que se tarda de un lugar a otro de los tres puntos claves. El equipo tarda 10 minutos desde donde apareció el kayak hasta donde aparecieron los cuerpos, pero desde esta última zona hasta donde se encontró el coche hundido, los periodistas han tardado casi 30 minutos y han tenido que abandonar el camino a la mitad del trayecto por los obstáculos de la zona y la advertencia de los Mossos d’Esquadra.