Visita 'El programa del verano' la tercera finalista de la última edición de 'Supervivientes', Melyssa Pinto. La concursante no puede evitar emocionarse al ver las imágenes de su paso por el concurso, secándose las lágrimas habla de lo difícil que fue para ella la estancia en Honduras, "fue un shock muy fuerte, pasar de tener todo a no tener nada".
Melyssa recuerda esos primeros días en la isla cuando casi abandona el concurso: "Yo no quiero estar aquí. Yo quería marcharme". Pero después la superviviente resurge de sus cenizas como un ave fénix, "necesito unos días para adaptarme pero siempre termino adaptándome a todas las situaciones". Poco a poco fue ganando fuerza, Melyssa se sentía "orgullosa de conseguir ganar y que la gente me apoyara, me vine arriba".
La finalista explica que el origen de su emoción es "porque a pesar de todo lo malo, lo bueno ha sido increíble y a día de hoy lo echo de menos". Pero por otro lado, Melyssa especifica que "no volvería pasando hambre".