La noticia del 4 de noviembre de 2020 no es quién ha ganado las elecciones en Estados Unidos, es la entrevista bomba que Kiko Rivera ha concedido a una revista atacando como nunca hubiéramos imaginado a su madre Isabel Pantoja. El país está en shock y Ana Rosa todavía no ha conseguido asimilar la información: “Me ha dado tiempo a leerme los subtítulos y los ladillos y todavía estoy impactada, no sé qué más vais a contar de esa entrevista que es una auténtica bomba nuclear que cae sobre Cantora”, aseguraba la presentadora antes de que Joaquín Prat le leyera algunos de los titulares más fuertes del hijo de Paquirrí.
“No cedí Cantora a sabiendas, no sé lo que firme”, “Se ha dicho que el 100% de Cantora es mía, que mi padre me lo dejó y el usufructo para ella… ¡Esa casa es mía!”, “Te has vendido como la mejor madre del mundo y perdóname, pero no lo eres y añade que como abuela para sus hijas no existe”… Estos son solo algunos de los titulares que Kiko Rivera ha soltado en una entrevista que podría suponer el final de la idílica relación que todos pensábamos que mantenía con su madre y que estalló por los aires el día que el cantante se sentó en el ‘Deluxe’ y confesó públicamente que estaba atravesando una depresión “no tengo ganas ni de vestirme”, aseguraba.
El hijo de la tonadillera ha llegado a decir que su madre le dijo el 2 de agosto, el día del cumpleaños de Isabel, “Que nadie se olvide que la única Pantoja es mi hija”, refiriéndose a su hermana Isa Pantoja. Ana Rosa Quintana no daba crédito antes las impactantes declaraciones de Kiko Rivera y ha tenido claro que la relación madre e hijo se había roto para siempre: “Esto no tiene vuelta atrás, no se han roto todos los puentes, se han pulverizado”.
Eso sí, respecto a la herencia, a la presentadora le ha extañado que el hijo de Isabel Pantoja y Paquirrí no hubiera visto nunca el testamento: “Me llama la atención que tiene 37 años y está hablando de un testamento qué ¿no ha visto nunca?”.
El hijo de Isabel Pantoja ha abierto la caja de los truenos y ha cargado con muchísima dureza contra su madre. Parece que no le perdona que haya asegurado que él no es un Pantoja o que le haya echado en cara públicamente lo mucho que le ha ayudado cuándo él no lo siente así. Pero el cantante ha ido más allá y ha llegado a afirmar que Isabel Pantoja no es solo “mala madre” si no una abuela inexistente.
Kiko Rivera estaba dispuesto a parar la entrevista que le iba a conceder a Mila Ximénez al saber que su madre estaba muy afectada por este enfrentamiento televisivo que estaban protagonizando y pidió que le dijeran a su madre que le llamara. Sin embargo, la única llamada que recibió según Rossi fue la de los abogados de su madre pidiéndole las llaves del coche que le había regalado ella.
Cansado de guardar silencio, Kiko Rivera ha querido que todo el mundo supiera que su hermana tenía motivos de sobra para no tener relación con el resto de la familia, que su madre es una mujer influenciada y que si él no hubiera estado su hermana ya no llevaría el apellido Pantoja.