El hermano de Víctor Laínez, el hombre asesinado presuntamente por el antisistema Rodrigo Lanza en el que ha pasado a conocerse como el crimen de los tirantes ha hablado sobre el cambio de imagen del acusado. "Cuando le vi entrar no le reconocí, pensaba que era el ayudante del abogado. Parecía el yerno perfecto", ha comentado el hermano de la víctima sobre el sorprendente cambio de imagen del acusado.
Además, Javier Laínez ha matizado que "la familia no quiere venganza, sino justicia" por la paliza mortal que recibió su hermano. El presunto asesino, Rodrigo Lanza, apareció en el juicio sin rastas, bien peinado, con camisa y sin los llamativos piercings que llevaba. Lanza cumplió cinco años de condena por dejar tetrapléjico y con graves secuelas a un guardia urbano, padre de cuatro hijos.