Cerca de 350 personas se concentraron en la plaza de Aranda de Duero para defender la inocencia de los jugadores, condenados a 38 años de cárcel. La redes sociales se hicieron eco de estas informaciones y las criticaron con dureza. Mientras, varios audios de WhatsApp que la víctima envió a una amiga han sido filtrados en las redes sociales. La distribución de esos audios por redes sociales puede acarrear un multa de hasta 20 millones y cinco años de cárcel.