La asesina confesa del pequeño Gabriel entró en la prisión almeriense el pasado 15 de marzo en régimen de aislamiento. Sin embargo, la situación ha cambiado y Ana Julia ha pasado a un régimen habitual, conviviendo en el módulo 1 junto con otras 50 presas.

¿Cómo han sido los últimos 6 meses en la prisión de El Acebuche para Ana Julia Quezada? Este programa ha hablado con familiares de presas y presas que salen y entran de la cárcel para disfrutar sus permisos.

Varias presas de la cárcel de El Acebuche, consultadas por este programa, aseguran que la estancia de Ana Julia entre rejas no está siendo especialmente dura. “Lo único que sé es que está muy a gusto y feliz. Le traen la comida en bandeja, tiene ducha y un cuarto de baño normal mientras el resto tiene un agujero. Ella es sola… es la reina”. Además, explican que otras presas se refieren a ella como la marquesa: “Es la marquesa de Villaverde”.

Con el cambio de régimen, Ana Julia se incorpora a la vida normal de la cárcel, compartiendo patio y actividades con el resto de presas. A pesar de ello, no está bien recibida por el resto de las reclusas. "Le tenían que cortar el cuello, que me la den a mí...que ya verás lo que le hacía yo", dice una de ellas. Asimismo, asegura que las presas no pueden insultar a Ana Julia porque "si algún preso la insulta le echan seis meses más".

También hacen hincapié en que el aspecto físico de la asesina de Gabriel ha cambiado. “Se ha puesto ‘gordica’”, dice una presa. “No me extraña porque no está haciendo nada”, responde otra.

Por otro lado, desde los juzgados de Almería, mientras Ana Julia ya se encontraba ante el juez, el periodista de 'La Voz de Almería' Javier Pajarón ha adelantado que la defensa de Ana Julia va a solicitar un informe psicológico. Además, el juez ha anunciado a su llegada al juzgado que Ana Julia no está acusada del delito de detención ilegal y, por lo tanto, será juzgada únicamente por los delitos de asesinato y contra la integridad moral.

Los audios insultando a Gabriel y las imágenes antes de su detención, claves en el juicio

Ana Julia Quezada se sienta por cuarta vez ante el juez por el crimen del pequeño Gabriel. La asesina confesa del niño será juzgada por un jurado popular y la instrucción está prácticamente cerrada. Las pruebas claves para juzgarla son los audios en los que Ana Julia hablaba mal e insultaba al pequeño y las imágenes, minutos antes de su detención, desenterrando el cuerpo de Gabriel y metiéndolo en su coche. Además, la instrucción ha descartado la existencia de cómplicesy también la muerte accidental.