Solamente 20 minutos de declaración ante el juez hicieron que este enviara a la presunta parricida de Logroño a prisión sin fianza, acusada de un delito de homicidio. La madre sigue negando en las declaraciones haber acabado con la vida de su hija, se muestra ausente y pasiva. En las siete cartas han encontrado un mensaje dirigido al padre de su hija diciendo que lo quiere y que nunca le ha sido infiel. Por otro lado, los abuelos paternos se han mostrado destrozados y esperan que haya justicia.