Ana Rosa Quintana se ha despedido de las mañanas de Telecinco tras casi diecinueve años de éxito y lo ha hecho dando un discurso de lo más emotivo en el que no ha podido contener las lágrimas. Dice adiós a una de las etapas más importantes de su vida, para comenzar otra en septiembre al frente de TardeAR.
Aunque la presentadora de ‘El programa de Ana Rosa’ siempre ha asegurado que no le “gustan las despedidas”, no podía marcharse como si nada de un espacio que ha sido líder día sí y día, también, durante diecinueve temporadas.
“He pedido encarecidamente a mis compañeros y a Xelo que, por favor, no quería hacer nada porque para mí ya es bastante duro irme (...) He pasado un tercio de mi vida en este sofá”, decía la reina de las mañanas.
Su discurso ha comenzado recordando a algunos rostros que la acompañaron durante años al frente del magacín: “Quiero acordarme de Máximo Huerta, de Óscar Martínez y de todas las personas que han pasado por aquí”, declaraba.
Después de recordar a los presentadores, la conductora del espacio ha querido mandar un bonito mensaje a la audiencia que la ha acompañado durante casi dos décadas: “Siempre hay una primera vez en la vida y hay una última para todo. Dicen que el ser humano necesita historias para sobrevivir”, apuntaba.
Tras esas palabras, la presentadora ha hecho balance de todas las noticias que se han contado a lo largo de estos años en ‘El programa de Ana Rosa’ y ha hecho una mención especial: “La primera vez más asoladora sobre la que tuvimos que informar fue la primera pandemia mundial del siglo XXI”, aseguraba.
“La pandemia dejó miles de muertos en todo el planeta. Durante aquellos madrugones, se escuchaba un silencio aterrador”, declaraba la presentadora en su discurso de despedida de las mañanas de Telecinco.
“Las mejores primeras veces han sido las de nuestros hijos. Cuando se estrenó este programa, los míos tenían meses y, después, nacieron otros sesenta de compañeros nuestros”, aseguraba, con mucha emoción y al borde del llanto.
“Yo misma he renacido durante este programa y renacer, siempre, espero, te hace más fuerte”, aseguraba la presentadora, haciendo alusión al duro bache vital que ha superado recientemente.
“Hoy acaba una etapa, pero nace otra. Hoy se cierra con orgullo y dejaré de decirles buenos días, pero les voy a decir buenas tardes. Muchas gracias por todo”, decía para rematar y visiblemente emocionada.