La organización que formaban 'Manos Limpias' y 'Ausbanc' están acusadas de extorsionar, amenazar y estafar a las entidades que sentaban en el banquillo. A cambio de grandes sumas de dinero ofrecían a los acusados retirar sus denuncias contra ellos. El encargado de contactar con las entidades financieras era Luis Pineda, el presidente de 'Ausbanc' quien les proponía que ayudara a financiar su organización a cambio de no investigar sus bancos. En caso de no aceptar el chantaje, la organización demandaba a la entidad a través de 'Manos Limpias', toda una trama de extorsión y chantaje que sentará a las dos sociedades ante el juez.