Catorce años después de ser acusada del asesinato de Rocío Wanninkhof y 11 años después de haber sido puesta en libertad, Dolores Vázquez ha narrado cómo han sido los últimos 14 años de su vida. "La Guardia Civil me decía que cuando terminaran no me iba a creer ni mi abogado", ha dicho Vázquez, que ha asegurado que sigue siendo vista como culpable.