Antes de que Morey y Fran tengan tiempo de registrar el centro cívico en el que trabaja Fátima, alguien se les adelanta y roba todo el material informático. Además, Fátima asegura a Morey que alguien la está siguiendo. Posteriormente, el agente del CNI descubre que se trata de uno de sus propios compañeros. Fátima se ha convertido, por tanto, en una sospechosa más para sus jefes del CNI, por lo que debe ser investigada. Sin embargo, los primeros indicios revelan que la joven musulmana no es la única persona del centro cívico que parece estar involucrada con Akrab. Entretanto, Faruq trata de descubrir por su cuenta el paradero de Abdu.