El PSG no asumió nada bien la derrota ante el Real Madrid por 3-1 y tras el partido tanto Unai Emery como el presidente del club parisino mostraron su malestar con la actuación del árbitro. El técnico vasco destacó que siempre pitaba para el lado del Real Madrid mientras que Nasser Al-Khelaïfi no dudó en afirmar que los árbitros habían estado con los de Zidane.