Aitor Canales acuerda la operación de reducción de estómago como una medida de último recurso. En primer lugar, el hijo de Carla y Carlos se someterá a una dieta exhaustiva durante un plazo de dos meses. Analizando la voluntad del menor, es comprensible que esté dispuesto a solucionar el problema por la vía rápida para pasar a ser un niño normal cuanto antes por el problema de acoso escolar que está empezando a padecer. Por otro lado, ha quedado acreditado que Carla ha sido una madre indulgente ante la dieta de su hijo. El letrado tiene una cuestión clara: el menor no tiene una enfermedad problemática diagnosticada, únicamente se trata de obesidad sin enfermedades asociadas como la diabetes que puedan poner en riesgo su vida a día de hoy. Reducir el estómago sólo se trata de una solución a corto plazo, ya que si el niño sigue ingiriendo alimentos muy calóricos, volverá a padecer el mismo trastorno con el tiempo.