Antes de su divorcio, Jacobo le hizo a Mari algo que fue el fin de su matrimonio: le pidió a una amiga suya que se hiciese pasar por su esposa en una cena de trabajo. Mari lo descubrió y montó tal espectáculo en el restaurante que se fue al traste el negocio que iba a firmar su marido, o al menos eso era lo que él dijo.