Paloma Zorrilla considera que tanto Fran como José María tienen que llevar a sus perros con las condiciones que cada una requiere, por lo que desestima la demanda de José María de 2.000€ para educar a su perro y la de Fran que pide la ejecución del perro. La letrado considera que se trata de un problema de convivencia entre vecinos y que lo que tienen que hacer es aprender a vivir en comunidad.