Hace cinco años Pepe le entregó a su hermano Luis lo que más quería, a sus hijos, para poder irse a trabajar al extranjero. Luis prometió cuidar de los niños como si fuese su padre pero parece ser que no lo ha hecho. Luis, al caer su mujer enferma, se vio obligado a entregar a sus sobrinos a los Servicios Sociales porque no podía hacerse cargo de los tres menores. Pepe, a su regreso, ha descubierto este hecho y ha denunciado a su hermano Luís. Le exige que le pague los 100.000 euros que va a costar los trámites judiciales para recuperar a sus niños. ¿Debe Luis pagar caro el haber entregado a sus sobrinos a los servicios sociales?