Javier Ungría se sentaba por primera vez en el plató de '¡De viernes!' y lo hacía con un claro objetivo, contarlo todo sobre su relación con Elena Tablada. El exsuperviviente condecía una de sus entrevistas más personales y respondía a las declaraciones que su ex hizo en la docuserie de 'Me quedo conmigo' de Mtmad.
Tras escuchar las palabras de Elena en las que afirmaba que ''después de casarse había descubierto un nuevo Javier'', el empresario se pronunciaba, muy contundente: ''Nosotros teníamos una unidad familiar y hubo un momento en el que yo era el último mono de la casa. Acabas cansado''.
Además, respondía a sus afirmaciones en las que aseguraba que ''mendigaba amor'': ''Elena no es una mujer cariñosa y ella lo sabe, tiene virtudes y ser cariñosa no es una de ellas''.
El exsuperviviente se pronunciaba también sobre la visión tan diferentes que ambos tenían a la hora de educar a su hija: ''Yo tenía una manera de ver la vida, no digo que mi educación sea la mejor, pero he mamado una cosa de pequeño y cuando tengo mi núcleo familiar hay que intentar ir a la par y cuando estás en desacuerdo con eso, desgasta''.
Y revelaba cómo quería educar Elena a su hija: ''Elena es más relajada y yo soy más estricto y no pasa nada, ahí chocábamos. Yo soy un poco pesado con los modales, con la educación, soy un pesado, pero no voy a cambiar y voy a hacer con mi hija lo que me dejen''.
''No le sentaba mal, pero ella no hacía lo mismo y cada uno hacía una cosa. Yo había las cosas de una manera, ella de otra, te desgastas y a mí me daba pereza ya porque dije 'aquí no voy a ningún lado'', aseguraba y le lanzaba un dardo a Elena: ''Resume nuestra relación de siete años en tres meses. Cuando te separas tienes una época malísima, no estás en casa, discutes...Es una pena que la memoria sea corta y selectiva''.