Grissom y Warrick acuden al escenario para procesarlo y recabar pruebas. Los resultados del análisis de unas manchas en las sábanas de una de las camas revelan que Chelsea es la madre de Bianca y que mantuvo relaciones sexuales con la víctima. Además, los forenses descubren que Bianca ha mantenido varios romances recientemente: uno con un técnico de teléfonos, el segundo con Ahren y el tercero con otro hombre.
Mientras tanto, Catherine y Nick llegan al lugar donde se encuentra el cuerpo sin vida de Sylvia Mullins en un automóvil. Los forenses descubren que la víctima gestionaba el patrimonio del padre fallecido de Kelly Gordon, viejo conocido de Nick. Poco después. Stokes abre el maletín de la contable, en el que halla una grabación de la víctima hablando con Kelly, evidencia que podría ayudarle a identificar al asesino de Sylvia.