Corinne Palmer muere misteriosamente en el spa del campus y todas sospechas recaen en su compañera de habitación Monica Daw.
A medida que avanza la investigación del suceso, Horatio Caine descubre que Daw padece un trastorno cognitivo que le provoca desmayos y que cuando se despierta se convierte en una persona completamente distinta.
El esclarecimiento del crimen se complica cuando los forenses constatan que el novio de Corinne, otro de los sospechosos, fue seducido por la propia Monica y que ésta acaba de ser atacada misteriosamente.