Simeone salió con una alineación atrevida. Sin mediocentro defensivo puro. Saúl y Koke en la manija del equipo con Carrasco y Gaitán en las bandas. El Atlético recordó a las primeras alineaciones que hizo el técnico argentino en este inicio de temporada, pero que borró de un plumazo tras varios malos resultados seguidos. La única ausencia por descanso fue la de Godín en el centro de la defensa. Un respiro para una de las extensiones de Simeone sobre el terreno de juego.
El frío y el viento en el Calderón hizo muy difícil mucho el juego de los dos equipos. El Atlético buscaba profundidad por las bandas con Carrasco y Gaitán. El Eibar estaba agazapado atrás, bien replegado y aguantando sin ceder un espacio. El buen hacer de los de Mendilibar en Liga se pudo ver también en Copa. Tanto la grada como el equipo rojiblanco tardó en entrar en calor. Bebé hizo el primer disparo peligroso que obligó a Moyá a enviar a córner con una buena estirada pegada al palo.
El público despertó un poco más con el gol anulado a Savic. Mateu Lahoz vio posición adelantada de Griezmann, que peinó el balón para que llegara al central y el tanto no subió al marcador, pese al cabreo de Simeone. Fuera de juego, pero por muy poco. Sólo unos segundos después, sí valió el tanto. Koke puso un balón en el punto de penalti, Giménez le ganó la partida a Yoel, que falló estrepitosamente en su salida, y su cabezazo lo golpeó Griezmann antes de entrar en la portería. El Atlético se ponía por delante con un nuevo tanto del francés.
Sin más ocasiones que el gol de Griezmann y el disparo de Bebé se llegó al descanso. El regalo de Yoel permitía a los de Simeone ir por encima en el marcador sin haber hecho mucho más que el rival. El delantero francés fue de los que se ofreció y se movió junto a Gaitán en el Atlético. A Carrasco también se le vio, pero sin demasiada suerte en el uno contra uno.
Al Eibar le costaba mucho crear peligro y el Atlético golpeó por segunda vez. Yannick Carrasco hizo una jugada individual por la banda izquierda, llegó a la línea de fondo, recortó hacia dentro y su disparo lo rechazó Yoel para que Correa empujara a placer. Era el 2-0 y el Atlético ponía muy de cara el pase a semifinales. A los pocos minutos de marcar dejó su puesto a Gameiro.
Mendilibar buscó el gol con un doble cambio con la entrada de Sergi Enrich por Inui y la de Luna por Peña. Simeone respondió con un cambio táctico y puso más control en el centro del campo con la entrada de Gabi por Carrasco. El belga no destacó pero fue el protagonista en la jugada del segundo gol.
Pero no le sirvió de mucho a Mendilibar. El Atlético de Madrid firmó el tercero con la marca de Kevin Gameiro. Primero cabeceó Giménez en el área, luego Griezmann y el delantero francés remató completamente solo para hacer el tercero. Aún restaban 20 minutos para el final y sin un gol, el Eibar casi se podía despedir de su aventura en la Copa.
El resultado difícilmente podía ser mejor para el Atlético. Simeone lo sabía y lo quería guardar hasta el final. La portería a cero era vital para viajar a Ipurúa con tranquilidad. Por eso, Godín entró en el lugar de Nico Gaitán. Las bandas habían desaparecido y más músculo en el medio con Giménez, Gabi, Koke y Saúl.
El Atlético tiene casi los dos pies en las semifinales de la Copa del Rey. Salvo catástrofe en Ipurúa, Simeone ya tiene a su equipo en la siguiente ronda y el encuentro de vuelta será un trámite.