Las cámaras de Telecinco captaron a varios aficionados blaugranas arrancando las localidades que estaban ocupando en el Vicente Calderón. Un gesto feo y poco cívico, más teniendo en cuenta la voluntad del club de entregar los asientos a los socios abonados, como forma de despedir el estadio antes de mudarse al Wanda Metropolitano la próxima temporada.