Dos estilos muy diferentes se enfrentaban en el tercer encuentro del grupo F. Una Suecia muy trabajadora y con las consignas claras de buscar la altura de sus futbolistas, frente a la velocidad de México para conectar balones en profundidad con Lozano, Layún, Vela o Chicharito. Ambas selecciones se jugaban el pase a los octavos de final por lo que tenían en este partido una auténtica final.
El encuentro comenzó con un récord de los mundiales. A los seis segundos del encuentro, Jesús Daniel Gallardo, defensa de México, realizaba una falta por la que veía la amarilla a los trece segundos. Una tarjeta con la que el futbolista mexicano recibía la tarjeta (amarilla o roja) más rápida de la historia de un Mundial. Algo que fue muy protestado por los jugadores mexicanos al considerar exagerada la tarjeta.
Tras los primeros veinte minutos, la tónica dominante del encuentro era una gran igualdad de ocasiones entre los dos equipos. Cada uno con su estilo, comenzaron a generar peligro en las porterías defendidas por Ochoa y Olsen. La más clara de los mexicano la tendría en sus botas Carlos Vela, con un disparo desde fuera del área que se marchó rozando la portería. Por su parte, Emil Forsberg sería el protagonista de la ocasión más clara de los suecos con un disparo de falta ante el que tuvo que responder de manera espectacular el Memo Ochoa.
Antes de llegar a la media hora, el VAR volvió a aparecer. Jugada polémica por supuesta mano de Chicharito, que Néstor Pitana quiso comprobar con el vídeo arbitraje. Tras varios segundos, el colegiado argentino decidió no señalar la pena máxima provocando el enfado del entrenador sueco Janne Andersson, quién no comprendía la decisión e incluso llegó a discutir con el cuarto árbitro.
Un empate sin goles con el que los dos equipos se marcharon a vestuarios, en una primera mitad en la que pudimos ver ocasiones de todo tipo. A la vuelta de los quince minutos de descanso el partido cambió por completo. En el minuto 50 de partido, Augustinsson aprovechaba un rebote en el área para colocar el primero del partido con un disparo ante el que poco podía hacer Ochoa.
Diez minutos después, Hector Moreno provocaba penalti y Granqvist se encargaba de anotar el segundo del encuentro con una pena máxima que se coló por toda la escuadra. Un gol que acercaba los octavos de final a la selección sueca y que metía el nerviosismo en el cuerpo de México, que podía verse fuera del Mundial pese a sus dos victorias.
Y peor se pondrían las cosas en el minuto 74 de encuentro. Gran jugada de Suecia que acabaría con Edson Álvarez introduciendo con muy mala fortuna la pelota en su propia portería. Sentenciaba el encuentro el conjunto dirigido por Andersson, asegurándose el primer puesto del grupo. Con victoria por 3 a 0 terminaría el encuentro, siendo un resultado por el que los dos equipos lograban la clasificación a los octavos de final, gracias a la victoria (0-2) de Corea del Sur ante Alemania.
Análisis del partido:
Suecia ha goleado a México en una segunda mitad en la que han sido superiores en todo momento, con un gran juego directo ante el que poco pudo hacer la defensa mexicana. Un resultado que permite el pase de Suecia como primera, y de México como segunda, eliminando a Alemania de los octavos de final.