Lo hemos visto muchas veces y en el Mundial ha vuelto a suceder. La repugnante imagen en la que hinchas de fútbol que se creen protegidos por la euforia o simplemente el alcohol deciden que tienen derecho a acosar, tocar o besar a reporteras que están haciendo su trabajo. Nuestra compañera María Gómez, harta de esta situación, ha lanzado este mensaje de denuncia en defensa de todas las mujeres que, como ella, ejercen de profesionales de la información y tristemente se ven asediadas por estas actitudes asquerosas a diario. Una denuncia que no nos vamos a cansar de hacer hasta que esto deje de suceder. Gracias, María.