Partido de emociones fuertes y es que en el minuto cuatro ya veíamos el primer gol. Falta de Luka Modric a Dele Alli en la frontal del área y golazo de Trippier, eso sí, con algo de ayuda del portero Subasic, que podía hacer más. Los 'Tres Leones' por delante, Croacia, obligada a remontar.
Inglaterra se mostraba superior en los primeros minutos con una Croacia que sufría mucho en las jugadas a balón parado. El partidos e convertía en un encuentro de ida y vuelta con ocasiones para ambas selecciones. Kane estuvo muy cerca de hacer el segundo gol para los ingleses pero su balón se estrelló contra el palo.
El partido se iba al descanso con una Inglaterra muy superior y con Croacia que casi no había tenido ocasiones para remontar el gol. Mucho tenían que cambiar en el vestuario para poder ganar el partido en la segunda parte.
La segunda parte comenzaba con Croacia mucho más volcada en ataque. Los balcánicos tuvieron algunas ocasiones muy claras para poner las tablas en el marcador y esta vez era Inglaterra la que esperaba agazapada a la contra. Los jugadores ingleses tapaban con todo las acometidas croatas.
Tanto empeño en ataque se vía recompensado con el gol de Perisic. Centro de Šime Vrsaljko desde la banda y el delantero del Inter elevaba la pierna al máximo pero sin cometer falta para meter el balón dentro de la portería de Pickford. Inglaterra vivía sus peores momentos y a punto estuvieron los croatas de hacer el segundo. De nuevo Perisic pero esta vez su disparo salía rebotado contra el palo.
Ocasiones para ambos equipos y la sensación de que la victoria podía caer de cualquier lado. Croacia e Inglaterra no arriesgaban el pase a la final en los últimos minutos con lo que el partido se marchaba a la prórroga.
La primera parte de la prórroga estuvo falta de ocasiones. Croacia hizo varios cambios para dar oxígeno al equipo tras no haber hecho ni una sola sustitución en los 90 minutos de partido. Croacia remontaba el marcador en los primeros minutos de la segunda parte. Perisic peinaba el balón, la defensa inglesa se dormía y Mario Mandžukić cruzaba el balón para poner el 2-1 en el marcador. La sensación, que Croacia iba a llevarse el partido aunque quedaban aún 10 minutos por delante.
Inglaterra pagaba el esfuerzo hecho en la primera parte y se quedaba sin fuelle para remontar el partido en los últimos minutos. El marcador no se iba a mover más, Croacia se hacía con la victoria y con el pase a la final del domingo ante Francia.
Análisis del partido
La primera parte fue para Inglaterra pero a partir del descanso Croacia reaccionó. Los segundo 45 minutos fueron de dominio croata y en la prórroga sentenciaron el partido. La defensa inglesa se relajó, una actitud que adoptó toda la selección inglesa.