Pese a que el título no estaba en juego, Bélgica salía muy enchufado al partido. Tanto, que en el minuto tres la selección belga ya ganaba. Transición rápida de los de Roberto Martínez, gran centro de Chadli y gol de Meunier que sólo tenía que empujar la pelota.
Bélgica llevaba el ritmo del partido. Los 'Diablo Rojos' hacían y deshacían a su antojo. Inglaterra, con muy pocas opciones de peligro. Los dos equipos se repartieron las ocasiones en los últimos minutos de la segunda parte. Inglaterra subió una marcha pero seguía a remolque. Los belgas se marchaban a vestuarios por delante en el marcador.
Inglaterra comenzó mejor la segunda parte. En el minuto 53, Kane pudo abrir el marcador para los ingleses pero no llegó a conectar por muy poco el pase de Lingard. Lukaku, poco acertado durante todo el partido. En el minuto 55 desaprovechaba un gran pase que le dejaba sólo ante el portero.
Dier tuvo en el minuto 69 la ocasión más clara para Inglaterra. Gran jugada en equipo que culminaba Dier picando la pelota ante Courtois. En última instancia, Alderweireld sacaba el esférico de la línea con un despeje acrobático. Seguía el 1-0 en el marcador. Inglaterra, rozando el gol y mereciendo el empate.
En el minuto 79 Bélgica pudo cerrar el partido. De nuevo Meunier tuvo en sus botas el segundo pero su volea de primeras era despejada por Pickford con un auténtico paradón. En el minuto 81, contra de escándalo de Bélgica que culminaba Hazard con una gran definición ante el portero.
El marcador ya no iba a moverse más y la selección belga se hacía con el tercer puesto en el Mundial de Rusia, el mejor registro de los 'Diablos Rojos' en una Copa del Mundo.
Análisis del partido
La primera parte fue para Bélgica, que salió muy metida en el partido. Con el paso de los minutos los ingleses fueron ganando enteros pero Inglaterra daba la sensación de no haber salido metida al partido. Bélgica fue dueña del partido de principio a fin.